El acceso a las becas estudiantiles en la Ciudad de Buenos Aires enfrenta serias dificultades.
Profundizando la desigualdad con las becas educativas
La Auditoría General de la Ciudad de Buenos Aires (AGCBA) ha revelado en su reciente informe sobre el programa de becas para estudiantes de nivel medio en la educación pública, múltiples fallos estructurales que dificultan el acceso de los estudiantes a este beneficio crucial. Sin este apoyo, muchos podrían no tener la oportunidad de completar su educación secundaria, lo que limita sus oportunidades futuras y perpetúa las desigualdades educativas y socioeconómicas.
La falta de coordinación y capacitación se destaca como un problema central, ya que varias instituciones carecen de un referente de becas capacitado, un rol crítico para conectar a los alumnos con la ayuda estatal necesaria para continuar sus estudios. Además, la ausencia recurrente de actas de los comités de becas, responsables de definir los beneficiarios, afecta gravemente la transparencia y eficiencia del proceso.
El informe también expone las contradicciones en la política educativa del gobierno de la Ciudad. Mientras se implementan subsidios extraordinarios para la educación privada, el sistema de becas para las escuelas públicas ha funcionado con serias dificultades durante años. Este contraste revela una visión estructural del oficialismo porteño respecto a la educación, que no parece ser un error, sino más bien un proyecto político deliberado. En contraste con las medidas adoptadas para las escuelas públicas, el gobierno de la Ciudad ha anunciado subsidios para pagar la cuota de la escuela privada sin límite de monto en los ingresos familiares. Los estudiantes de la escuela pública solo pueden acceder a las becas si su familia tiene ingresos inferiores a un salario y medio mínimo vital y móvil. Mientras tanto, el Estado subsidia la cuota de las familias que optan por la educación privada, incluso cuando sus ingresos pueden ser hasta tres veces superiores al umbral permitido para las becas en las escuelas públicas.
Las deficiencias en el sistema de inscripción representan otro obstáculo significativo. El trámite de las becas es mayormente informático, pero en algunas escuelas la falta de computadoras impide la inscripción de los alumnos. Esta discriminación tecnológica y administrativa limita todavía más el acceso de los estudiantes a las becas. Además, la falta de información precisa y actualizada agrava la situación, ya que los datos del Ministerio de Educación no coinciden con los de las instituciones educativas. Ante esto, se ha recomendado la creación de un listado uniforme y actualizado de la matrícula inicial y final, así como de los alumnos becados, separados por establecimientos educativos.
Las fallas identificadas en el circuito de información y en las instancias que definen las becas en las instituciones tienen un impacto directo en la cantidad de alumnos que no pueden acceder a estas ayudas, afectando la capacidad de las familias para mantener a sus hijos en las escuelas. Es necesario que la escuela pública sea un verdadero ámbito de integración. El gobierno del PRO, una vez más, muestra sus prioridades al aumentar los subsidios a las escuelas privadas mientras dificulta el acceso a las becas de los estudiantes de escuelas públicas. Es urgente mejorar la infraestructura y la gestión del sistema de becas para asegurar que todos los estudiantes puedan acceder a la educación, aprovechar las oportunidades que ésta les ofrece y asegurar que todos los estudiantes tengan igualdad de oportunidades en el acceso a la educación.